Simón Díaz tenía esa manera de cantar que a todos atraía. El tono de su voz era el sonido que representaba a Venezuela y sus tradiciones, y hasta la fecha no se ha conocido a otro intérprete que haya logrado alcanzar tanta venezolanidad como él.
La leche en polvo La Campesina fue comercializada exitosamente por todo el país, y fue mucha la ayuda de sus comerciales, que se quedaban grabados en nuestra memoria a la hora de ir de compras, y nos hacía pensar que si Simón Díaz compraba ese producto, nosotros también debíamos comprarlo. Así se popularizó la Leche en Polvo y la canción de la cuña, que fue tomada de un tema original.
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